Continuamos con el “cuarto capítulo” de la serie sobre la Inteligencia Emocional.
Si en los últimos post os hablé de los tres componentes de la Inteligencia Emocional Intrapersonal: el Auto – Conocimiento, el Auto – Control y la Auto – Estima, hoy os voy a hablar del primer componente de la Inteligencia Emocional Interpersonal (recordar, el modo en que nos relacionamos con los demás): LA EMPATÍA.
¿Cómo podríamos definir la Empatía?
Es algo MÁS QUE UNA HABILIDAD, que nos ayuda a ENTENDER las necesidades, sentimientos y problemas de los DEMÁS, poniéndonos en el lugar del otro y RESPONDIENDO correctamente a sus REACCIONES emocionales.
“Las tres cuartas partes de las miserias y malos entendidos del mundo, terminarían si las personas se pusieran en los zapatos de sus adversarios y entendieran su punto de vista” (Mahatma Gandhi)
¿Cuáles son los elementos clave de la conexión emocional con las personas con las que nos relacionamos?
Empatía Emocional: es el “chivato” interior que nos dice qué está pasando emocionalmente en nuestro interlocutor y es la responsable del “feeling”/conexión que sentimos con una persona. Sentimos la misma emoción que esa persona, pero no nos quedamos envueltos y dominados por ella.- Empatía Cognitiva: es la responsable de que nuestros interlocutores se sientan comprendidos. Nos ponemos en su lugar. Cuando alguien es escuchado y se siente entendido, su bienestar se incrementa exponencialmente.
- Preocupación Empática: es la ayuda, ofrecer más de lo que otros lo harían, anticiparse a la necesidad y a la forma de cubrirla. Se trata de llegar a conocer a nuestro interlocutor mejor que él mismo.
¿Cómo ser empáticos y compenetrarnos con las personas con las que nos relacionamos?
- Invita a tu interlocutor a que hable de él: otórgale todo el protagonismo y muestra especial interés por escucharle.
- Formúlale preguntas en segunda persona: incorpora el “Tú” en las preguntas que le plantees ya que de esa forma toda la atención estará centrada en él, y así lo percibirá. “¿Qué te parece?”, “¿Cómo lo ves?”, etc.
- Deja a un lado tu móvil: ni siquiera lo tengas delante o encima de la mesa. Tu atención debe de estar centrara en tu interlocutor y no en otra cosa.
- No respondas a una llamada o a un correo electrónico en mitad de una conversación.
- Sintonizando: tenemos que ser capaces de “bailar” con nuestro interlocutor.
- Atención plena: mantenernos completamente centrados en la persona con la que estamos, mediante el contacto visual, asintiendo, parafraseando, formulando preguntas, en definitiva, escuchando activamente.
- Con positividad: cuando hay “química” todo es más fácil y las cosas salen mejor, pues estamos abiertos a todas las posibilidades. Cuando escuchamos y empatizamos con el punto de vista de nuestro interlocutor, los obstáculos comienzan a desvanecerse.
Termino este post compartiendo con todos vosotros un video de una escena de la película “Up in the Air”, donde veréis lo que significa empatizar con la persona que tenemos delante.
Alberto de Haro. Executive & Life Coach
Acompaño a empresarios, autónomos, directivos, mandos intermedios y cualquier persona que lo desee, en su camino a alcanzar sus objetivos, metas y sueños personales y profesionales, ayudándoles a mostrar su mejor versión y a descubrir las respuestas que se hallan dentro de ellos mismos.
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