Voy a empezar este nuevo post haciéndoos dos preguntas (ya sabéis que a los Coaches nos pagan básicamente por preguntar):
- ¿Cuántos años os gustaría vivir?
- ¿Cómo os gustaría vivir los años de vida que os quedan?
Pongo mi mano en el fuego a que casi todos habéis respondido algo parecido a esto:
“Me gustaría vivir muchos años más, por ejemplo hasta los 80 o incluso los 90, siempre y cuando lo haga con una buena calidad de vida, con salud, rodeado de la gente a la que quiero y sintiéndome pleno y útil hasta el final de mis días”
Pues bien, tengo dos noticias que daros….efectivamente, lo habéis adivinado, una mala y otra buena.
La mala es que esa afirmación de arriba es muy fácil decirla, pero a veces, se complica el llevarla a la práctica, ya que, entre otras cosas, van a intervenir factores ajenos a nosotros, como por ejemplo puede ser una enfermedad no deseada (desconozco si existen enfermedades deseadas…), que nos van a poner las cosas más difíciles.
Pero la buena noticia es que existe una manera, una fórmula, una receta, que está en nuestras manos aplicar, para lograr lo que todos hemos contestado a esas dos preguntas: VIVIR MÁS Y MEJOR.
¿Os gustaría descubrir cuál es esa fórmula magistral mucho más poderosa que la de la misma Coca – Cola? Seguro que sí, así que….¡Vamos a ello!
¿En qué lugar del mundo se concentra la mayor población de personas centenarias del mundo?
Esta pregunta se la hicieron hace unos años dos españoles: Héctor García (ingeniero valenciano) y Francesc Miralles (periodista barcelonés), los cuales, para dar respuesta a la misma, decidieron emprender un viaje que les llevó hasta el pueblo japonés de Okinawa, que es la parte del mundo dónde viven el mayor número de personas que superan los 100 años de vida.
Allí entrevistaron a varias de estas personas centenarias, y cuando les preguntaban por qué tenían tantas ganas de vivir la palabra que pronunciaban era “IKIGAI”.
Todo lo que Héctor y Francesc vieron y escucharon allí les impactó tanto, que decidieron escribir un libro titulado Ikigai: los secretos de Japón para una vida larga y feliz, publicado en 2016 y vendido en 30 países, el cual recoge la esencia de esta filosofía de vida.
¿Qué es el Ikigai?
Es un término japonés formado por dos palabras: “Iki” que significa VIDA y “Gai” que significaría algo así como la realización de lo que uno espera y desea.
Por lo tanto podríamos definir el Ikigai como el motivo o la razón por la que nos levantamos todas las mañanas, algo que da sentido a nuestra vida y por la que vale la pena vivir.
Como nos cuenta en el libro Francesc Miralles, “todas las personas a las que entrevistamos tenían un ikigai, una motivación vital, una misión, algo que les daba fuerzas para levantarse de la cama por las mañanas”.
Es importante señalar que el objetivo último del Ikigai no es la felicidad (de hecho, Japón está en el puesto 51 de los países más felices del mundo según el World Happiness Report 2017 de Naciones Unidas)
“El objetivo es identificar aquello en lo que eres bueno, que te da placer realizarlo y que, además, sabes que aporta algo al mundo. Cuando lo llevas a cabo, tienes más autoestima, porque sientes que tu presencia en el mundo está justificada. La felicidad sería la consecuencia”, dice Miralles.
En definitiva, para los japoneses el ikigai es algo que sirve para tratar de encontrar nuestro Propósito de Vida o Elemento.
Veamos entonces cómo descubrirlo y cultivarlo.
Pasos a seguir para descubrir vuestro Ikigai.
Llegados a este punto puede que alguno de vosotros os estéis preguntado si todos tenemos un Ikigai. Puede que haya personas que sientan que no poseen habilidades especiales ni objetivos que cumplir.
Pues bien, como nos dice Francesc Miralles, eso es una creencia equivocada, “Por eso es importante mirar atrás y tratar de recordar qué cosas hacías bien cuando eras niño. Todos los niños tienen un don natural: unos para el dibujo, otros para la música, el baile, el deporte… Lo que ocurre es que estos talentos, cuando llega la edad adulta, se tapan y es cuando uno se pregunta: ‘¿Qué he hecho con mi vida?”.
El primer paso para descubrir cuál es nuestro Ikigai es responder algunas preguntas que nos pueden dar alguna pista:
¿Con qué actividades se me pasa el tiempo volando?
¿Qué me resulta más fácil hacer?
¿Qué tiene más valor para mí?
¿Cómo me gusta aprovechar las primeras horas de la mañana después de levantarme?
¿Cuál es mi elemento natural, en el que me encuentro más cómodo?
¿Qué me gustaba hacer cuando era niño?
El segundo paso sería rellenar vuestro propio mandala Ikigai a partir del siguiente dibujo:
- En primer lugar debes dibujar cuatro círculos unidos por el centro, como ves en el dibujo.
- El primer círculo, el de arriba, tendrá que contener respuestas sobre qué es lo que amas, es decir, cuál es tu PASIÓN.
- El segundo círculo, a la derecha, tendrá que contener respuestas a qué es lo que el mundo necesita de ti, es decir, cuál es tu MISIÓN.
- El tercer círculo, abajo, tendrá que contener las respuestas a aquello por lo que te pueden pagar, es decir, tu VOCACIÓN.
- El cuarto círculo, a la izquierda, tendrá que contener las respuestas a lo que tiene que ver con aquello en lo que eres bueno, es decir, tu PROFESIÓN (la que deseas realizar, que puede que no tenga que ver con la que haces).
¿Cuáles pueden ser momentos vitales en nuestras vidas en los que descubrir nuestro Ikigai nos podría ayudar mucho? Uno, sin duda alguna, sería cuando entramos en la adolescencia, dónde empezamos a tomar decisiones sobre nuestro futuro. El otro, cuando en plena madurez sentimos que debemos reciclarnos laboralmente (¿crisis de los 40?)
Así que si os encontráis en alguno de estos dos momentos vitales de vuestras vidas o en cualquier otro, os animo a que cojáis papel y lápiz, busquéis un lugar tranquilo donde ni nada ni nadie os interrumpa y comencéis a pensar en cuál es el motivo por el que os levantáis todas las mañanas.
Os dejo con un video que espero os inspire en esa búsqueda de vuestro Ikigai
Alberto de Haro. Executive & Life Coach
Acompaño a empresarios, autónomos, directivos, mandos intermedios y cualquier persona que lo desee, en su camino a alcanzar sus objetivos, metas y sueños personales y profesionales, ayudándoles a mostrar su mejor versión y a descubrir las respuestas que se hallan dentro de ellos mismos.